Capítulo 122

Emily de repente entendió por qué Alexander la había llamado. No era realmente para visitar a Eleanor—era para humillarla.

¿Qué podría ser más doloroso que ver a un esposo colmar de afecto a su amante?

De tal palo, tal astilla. Si Quentin podía traer descaradamente a su hijo ilegítimo a casa para ...

Inicia sesión y continúa leyendo