Capítulo 34

LUXURIA.

Habíamos regresado. Y sinceramente, temía por mi vida.

Parthe no me había dicho una palabra desde que dejamos la manada de mi padre. Ni siquiera una mirada en mi dirección. Era como si ya no existiera en su mundo, y eso me aterrorizaba más que cualquier otra cosa.

Su silencio era sofocan...

Inicia sesión y continúa leyendo