Reglas

Adea

Nadie se movió, nadie siquiera se inmutó. Era como si alguien cayendo muerto no fuera nada fuera de lo común. Miré alrededor de la sala, con una falsa sensación de esperanza, rezando para que alguno de estos hombres fuera normal. Estaban tan acostumbrados a la violencia que cuando la muerte se...