Capítulo 42 Una fría retribución

Los labios de Lilian se curvaron en una sonrisa helada mientras se acercaba, con la mano levantada, preparada para el inminente golpe.

—¡Ah!

La escoba cayó sobre el brazo de Wendy con un golpe seco, arrancándole un grito agudo mientras los objetos que sostenía caían al suelo con estrépito.

¡Zas! ...