RECLAMO.

—¡Perfecto! Me da gusto que les haya gustado la casa; se ve que son una pareja que se ama mucho. Tendrán un lindo hogar aquí.

Respondió sonriente la vendedora.

—¿Usted cree?

Preguntó Hayami mientras tomaba el brazo de Noah y pegaba su torso a él. Noah solo la miró extrañado sin ver venir que ella se...