INVITACIÓN.

—Te extraño, ya quiero estar contigo.

Hayami sonrió al escuchar las tiernas palabras de Noah a través del celular. Hayami estaba recostada en la cama, estaba boca abajo con sus codos recargados sobre la cama, con una mano sostenía el teléfono, su cabeza estaba recargada sobre la otra, mientras mirab...