Capítulo 32

Esto era. Este era el momento por el que había perdido demasiado sueño.

Había pasado mucho tiempo repasando mi discurso con Sylvia. Estoy segura de que a estas alturas Sebastian podría recitarlo él mismo de tanto escucharlo. Pero nadie más lo había oído; ni Beck, ni Finn, ni siquiera Axel. Estaba e...