6. La revelación de Fred

—Ah, mis nietos. Gracias, Smith, eso sería todo por ahora—. Ella asintió, despidiéndolo de la habitación.

—Vengan chicos, vamos a desayunar y luego hablaremos más—. Nos dijo mientras tomábamos asiento en su muy beige comedor.

Pasaron dos horas como era de esperar, y al final del desayuno, ella vol...

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