El rey cae

—¡Esto! Tus p-padres son... Cronos. —Murmuro débilmente su nombre, mis labios húmedos temblando, mi boca abierta liberando jadeos febriles mientras las yemas de sus dedos masajean suavemente la carne de mi trasero. No le importa si nos descubren, todo lo que desea es ponerme en mi lugar y no puedo e...

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