Capítulo 5

Christian

—¡Me voy!

—¿A dónde vas ahora?

—No es asunto tuyo, ¡no me esperes! La puerta principal se cierra de golpe con tal fuerza que juro que las ventanas tiemblan mientras mi esposa se apresura a salir vestida para una fiesta, mientras yo me quedo en la casa con nuestros dos hijos.

Nunca he estado en contra de que ella tenga una noche libre o se desahogue, siempre la he alentado a hacerlo, ni me ha importado las noches en las que ha salido tan tarde que terminó quedándose en casa de una amiga, pero últimamente parece ser su único interés. No recuerdo la última vez que tuvimos una cita o incluso nos acurrucamos para ver una película una vez que los niños están en la cama.

—3... 2... 1 —mi hermano Jack canta y, como era de esperar, Sophie empieza a llorar, el espectáculo de su madre al cerrar la puerta de nuevo la despierta. Suspiro y me paso las manos por el cabello. ¡Hace esto cada vez que se va sin importarle que despierte a nuestra hija cada maldito vez!

—Yo me encargo —Jack se levanta rápidamente del sofá y se dirige a su habitación. Pronto sus llantos cesan y momentos después baja las escaleras de puntillas mientras yo me dirijo a la cocina para agarrar una cerveza y empezar a limpiar el desorden que sé que Amy dejó allí al preparar la cena para los niños, ¡por una vez!

—Le cambié el pañal y se volvió a dormir. También asomé la cabeza en la habitación de Brody, está roncando como siempre —una risa se escapa de mis labios al imaginar su carita linda mientras duerme, pero luego la realidad se asienta pesadamente en mis hombros mientras dejo escapar un profundo suspiro y saco dos cervezas del refrigerador, pasando una a Jack.

—Háblame, hermano —levanto la vista y todo lo que veo es preocupación en su rostro. Tengo cuatro hermanos y una hermana, y aunque somos una familia muy unida, tengo que admitir que soy más cercano a Jack y a mi hermano menor Tom que a cualquiera de mis otros hermanos.

Como siempre, pensar en Tom hace que mi corazón se estruje. Pasó ocho años en el ejército y después decidió vivir en Florida con sus mejores amigos Archie y Molly. Hablamos todo el tiempo, pero aun así, extraño ver su cara todos los días.

No me sorprendió cuando Tom nos dijo que se mudaría a Florida con Archie y Molly. Tom y Archie han sido prácticamente mejores amigos desde el jardín de infancia y después de conocer a Molly en la secundaria, se volvió inseparable de ella también. Conozco bien a Archie, pero nunca he conocido a Molly. Para cuando ella se hizo amiga de los chicos, yo pasaba más tiempo fuera de casa del necesario, tratando de ser un adolescente cool y todo eso. Fue una época estúpida en mi vida, ¡pero hombre, fue divertida!

Hace seis años, mi abuela April lamentablemente falleció después de una larga y valiente batalla contra el cáncer y dejó su granja a mi papá, él era su único hijo, así que sabíamos que ocurriría. Mamá y papá pasaron los últimos seis meses de la vida de la abuela April en Texas cuidándola y todos quedamos absolutamente devastados cuando falleció.

Cuando éramos pequeños solíamos visitarla dos veces al año y era la mejor mujer que he conocido. Perdió a su esposo, nuestro abuelo, en un accidente de bote mientras pescaba un día cuando mi papá era adolescente, así que nunca llegamos a conocerlo, pero ella lo amaba más que a la vida misma y nunca siguió adelante sin él, así que me gusta pensar que finalmente están juntos de nuevo.

Después de que mi papá heredó el lugar, él y mi mamá decidieron mudarse aquí y comenzar de nuevo. Nos pidieron a todos sus hijos que nos uniéramos a ellos aquí y, a pesar de que mis hermanos y yo éramos adultos, todos decidimos venir.

Bueno, todos excepto nuestra hermana Mia. Ella está en una universidad en California, pero está considerando mudarse aquí una vez que termine la universidad. Creo que le encantará vivir aquí, sé que al resto de nosotros nos encanta y, a pesar de la situación en la que me encuentro ahora, todavía no me arrepiento de haberme mudado aquí porque si no lo hubiera hecho, no tendría a mi hijo o hija y no podría imaginar mi vida sin ellos.

—Christian... ¡Chris! Me sacudo de mis pensamientos perdidos y me concentro en mi hermano. —¿Dónde te fuiste? Se ve preocupado por mí y lo aprecio, pero simplemente odio estar en esta situación, para empezar. —Perdón, hermano, estaba pensando en Tom y la abuela April. ¿Qué dijiste? Tomo un trago de mi cerveza encontrándola vacía, así que saco otras dos del refrigerador y le paso una a Jack mientras empiezo a limpiar el desorden que ella dejó.

—Dije que me hables, hermano. ¿Qué está pasando? Y quiero la verdad. Se acerca a mí colocando una mano en mi hombro y apretando fuerte. —¿Qué quieres decir? Finjo inocencia, aunque no creo que me vaya a creer. Jack no es tonto y pasa mucho tiempo conmigo y en mi casa. Lo ve todo, aunque actúe discretamente, lo cual aprecio especialmente frente a mis hijos.

—No hagas eso conmigo. Sabes de qué estoy hablando, Chris. Ustedes no son como solían ser. Discuten más que nunca, ella se va más que nunca. Y últimamente, lo único que veo que haces es cocinar, limpiar, cuidar a los niños y trabajar. Es como si te hubieras convertido en un padre soltero, Chris. Ambos sabemos que es verdad, así que no intentes engañarme. Estoy aquí para ti, para mi sobrina y mi sobrino, lo sabes, y quiero ayudar, pero no puedo si no hablas conmigo.

Miro mi botella de cerveza medio vacía mientras trato de decidir qué decir. La verdad es que he estado evitando la realidad durante algunos meses y sé que necesito enfrentar las cosas, pero el resultado será que me iré de esta casa y estaré lejos de mi hija de 1 año y mi hijo de 3 años mucho más de lo que quiero.

—Hay algo que no me estás diciendo. Gruñe y todo lo que puedo hacer es asentir mientras las palabras queman la punta de mi lengua. ¿Cómo le digo a mi hermano que mi esposa ya me ha engañado dos veces? Que yo sepa, al menos. ¿Cómo le digo que sospecho que eso es lo que está haciendo esta noche?

Siento que estoy viviendo en el infierno ahora mismo, pero tal vez él tenga razón, tal vez es hora de hablar con mi hermano. Tal vez es hora de finalmente enfrentar la realidad y averiguar mi vida. Demonios, tal vez es hora de empezar a vivir mi vida de nuevo.