Sesenta y cinco.

Colt no había dormido bien en absoluto. Pero, no conocía a nadie que durmiera bien cuando estaba en una cama extraña. Así que pasó la noche dando vueltas, incapaz de ponerse cómoda o lo suficientemente abrigada para descansar. Pero, eso podría deberse a la ausencia de Calum, en lugar del gran dormit...