Progreso

Sus dedos estaban adoloridos de tanto practicar, las cuerdas cortaban la tierna piel de sus yemas, pero eso no impidió que Bree preparara la cena. La mayoría del tiempo desde el incendio, pedían comida a domicilio, o Trent preparaba algo cuando llegaba a casa, pero como había practicado tan bien ant...

Inicia sesión y continúa leyendo