Océano de lágrimas

El sol seguía brillando; las olas continuaban rodando por la orilla, mojando la arena y regresando al mar. Las gaviotas danzaban y jugaban sobre ella, y el cielo azul era vívido y brillante, negándose a esconderse entre las nubes.

Bree se hundió en la arena, recostándose contra las rocas que había ...

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