64,2

Después, ella se aleja de mi cara a gatas, mirándome por encima del hombro mientras me monta con sus piernas a cada lado de mi rostro. —¿Qué me estás haciendo?

La mejor pregunta es, ¿qué me está haciendo Isabel a mí? Esta chica me está consumiendo, tomando posesión de todo lo que soy.

Y creo que me...

Inicia sesión y continúa leyendo