Capítulo 9: El hijo de mi luna

El lugar era inhóspito, cómo se atreve a cobrar por este tipo de vivienda, debería de ser demolido por completo.

Llamé a la puerta, rápidamente me habló una joven de cabello rojizo que imaginé era la prima de Elizabeth.

-¡Buenos días!, estaba por presentarme, pero aparentemente no hubo necesidad....

Inicia sesión y continúa leyendo