Capítulo 261 Los celos de Dahlia

Viendo la envidia en el rostro de Dahlia, Susanna sugirió a Madison:

—Oye, ya que vamos a salir, ¿por qué no te pones la pulsera? Casi nunca la muestras.

Madison sonrió.

—Trabajo en un supermercado, así que no tengo oportunidad de usarla. Me rompería el corazón si se dañara.

—Vamos, hoy es perfe...