CAPÍTULO 12

—Estoy… bien… —Said tomó un vaso de agua mientras Bakari, el hombre que dirigía toda su seguridad, hablaba por el cable detrás de su oreja—. Puede irte Bakari… te llamaré luego.

El hombre corpulento de traje asintió mirando a todos alrededor para luego cerrar la puerta.

Por supuesto Rosheen estaba...