Capítulo 5) INTRODUCCIÓN FORZADA 2

Porishma Das:

Por la mañana, el Sr. Arjun Kashyap me presentó a todo el personal y empleados de la empresa. Todos fueron muy amables y felices de verme. Me ayudaron tanto que ni por un segundo pensé que hoy era mi primer día en la oficina.

Ahora es la hora del almuerzo, les sonrío y voy a prepararme una taza especial de café. Ya les di tres tazas de café a mis jefes y a su amigo. Mis colegas me miraban y sonreían. Me siento cómoda a su alrededor y especialmente con mis dos jefes. Son como hermanos para mí.

—¡Espera! ¿Qué hermanos? ¿Pero cómo y cuándo?

Tal vez los vi por primera vez en la entrevista o tal vez por la forma en que me miraban con tanto respeto. Sus ojos son fríos y vacíos, pero sus corazones son cálidos conmigo, no sé sobre los demás. Pero mis jefes son muy caballerosos. Dios los bendiga.

Ring Ring

—¡Hola! K.&K Corporation —dije con confianza.

—¿Puedo hablar con el Sr. Arjun Kashyap? —una voz muy dulce pero no tan amable vino del otro lado del teléfono.

—Ah, ¿quién es usted, señora?

—Soy su novia —dijo ella.

¿Qué? ¿Novia? ¡Huh! Ella piensa que soy estúpida. Investigué sobre mi empresa y mi jefe. Y están solteros y creo que el Sr. Kashyap es gay. No sé.

—¿Hola? ¿Hay alguien ahí? —preguntó de nuevo esa falsa novia.

—¡Huh! Sí, lo siento, señora, pero el señor no está disponible en la oficina en este momento. Si quiere dejarle un mensaje... —Beep beep beep.

¿Qué? ¡Colgó la llamada! ¿Qué clase de mujer loca era?

—¡Señorita Das! —mi tren de pensamientos fue interrumpido por una voz masculina profunda y el dueño no era otro que mi jefe, el Sr. Kashyap.

—¡Sí, señor!

—Ven a mi despacho ahora mismo —dijo y lo seguí como un cachorro perdido.

—¡Siéntate! —su voz es muy profunda.

Me senté y entonces llegó mi segundo jefe, el Sr. Khanna, con otro hombre apuesto.

—Señorita Das, conozca al Sr. Daniel Miller. Nuestro amigo, nuestra familia y también socio de negocios.

El Sr. Miller extendió su mano frente a mí y nos dimos la mano.

—¡Encantada de conocerlo, señor! —le sonreí.

—Es un placer conocerla también, señorita Das —dijo. Sus ojos estaban llenos de picardía.

—Señorita Das, ya nos conoció a nosotros, sus co-jefes de la empresa, y ahora conoce a uno de nuestros amigos y socio de negocios, el Sr. Daniel Miller, y otro más, el Sr. Davis Grey, que no está aquí pero vendrá pronto. Así que en realidad quiero decirle que los verá frecuentemente en nuestra empresa, así que cuídelos bien y siempre responda a sus llamadas o cualquier otro tipo de mensajes. Nunca los ignore ni sus correos, etc. ¿Está claro?

—Sí, señor, lo tengo claro —dije y él me sonrió.

Estaba hablando con Sudha ji y me enteré de que mi bebé está haciendo berrinches por su comida. Mi Ansh es muy quisquilloso para comer. Mi trance de pensamientos fue interrumpido por una mirada ardiente. Parece que alguien me está mirando con hambre, pero ¿quién y desde dónde? La mirada se intensificaba con el tiempo. Me sentí incómoda y tiré mi taza de café en el basurero y volví a mi despacho.

Comencé a sudar, sudar demasiado. Aún sentía la mirada que perforaba mi piel. Es espeluznante. Después de unos minutos me relajé y comencé a trabajar de nuevo, cuando de repente sentí que alguien estaba presente en mi despacho y vi a un hombre, no, un hombre guapo y sexy, parado frente a mí en todo su esplendor. Mis recuerdos me hicieron recordar que era el mismo cuyas caricias me dieron una descarga eléctrica con solo un toque.

Me levanté y le pregunté con confianza.

—¡Sí! ¿Quién es usted, señor?

Él se acercó y se paró tan cerca de mí. Tomó mi mano y besó el dorso de mi mano. Me estremecí por su toque, así que retiré mis manos de las suyas.

—¿Qué quiere, señor? —le pregunté enojada.

—¡Tú! —dijo con una sonrisa burlona.

—¿Qué? —dije.

—Quiero decir, ¿estás libre? —me preguntó.

—¿Por qué? —estoy asustada por la forma en que clava sus ojos en los míos.

—Porque quiero presentarme... —dijo con una sonrisa burlona.

—¿Para qué, señor? —mi tono se elevó.

—Para el amor, nena... —sus estúpidas respuestas me están sacando de quicio.

—¡Disculpe! —mi boca se abrió de par en par ante su descaro.

—Oh, en realidad, soy Davis, Davis Grey, amigo de Arjun y socio de negocios.

Extendió su mano para tomar la mía, pero retrocedí unos pasos lejos de él. Oh no, así que él es el Sr. Davis Grey. Mierda, y yo estaba hablando tan rudamente con él. El Sr. Kashyap ya me había dicho que cuidara de sus dos amigos y mira lo que estaba haciendo. Pero no fue mi culpa que él se presentara a la fuerza. Podría haberme dicho casualmente quién era, pero no, este señor arrogante no es de la manera simple.

Me recompuse y estreché su mano.

—Porishma Das, señor.

Él sonrió y se lamió los labios. ¡Mierda! Esto no es bueno. Puedo leerlo fácilmente. Me quiere y yo no soy un juguete. Eso es definitivo, tengo que mantenerme lejos de él. Retiré mi mano de su agarre. Sus ojos se abrieron de par en par con orbes negros profundos. Sé que no esperaba este tipo de comportamiento de mi parte, pero así soy yo, así que sí, estoy bien con mi gesto.

—Porishma Das —dijo.

—No, está equivocado. Mi nombre es Porishma, no Porshima, Sr. Grey.

—Davis —dijo.

—¿Qué?

—Mi nombre es Davis, no Sr. Grey, así que me gusta cuando me llamas Davis o Dave también está bien para mí, Sunshine, no Sr. Grey —dijo mientras me miraba directamente a los ojos y sus manos tocaban mis mejillas. Un escalofrío salvaje recorrió mi columna vertebral. La forma en que mi nombre suena tan bien de su boca me da escalofríos y mi apodo Sunshine también me recuerda a mis padres. Contuve mis lágrimas. Está bien, él no es un buen hombre... pensé.

—Eres amigo y socio de negocios y como secretaria es mi responsabilidad darte respeto, pero lo siento, no estás a la altura para recibir respeto de mi parte. Y tampoco eres mi amigo, así que no hay nombres de pila. Así que te llamaré Sr. Grey. Nuestra presentación forzada termina aquí, así que ¿me dejarás sola porque tengo mucho trabajo que hacer? —le dije y comencé a alejarme de él. Pero él me jaló hacia él. Mi mano sobre su amplio pecho musculoso y él envolvió sus grandes brazos alrededor de mi pequeña cintura. Mi corazón comenzó a latir anormalmente. Esto no está bien. Recuerdo lo que ese bastardo intentó hacerme cuando era una adolescente. Gracias a Mompi por todo lo que hizo para protegerme de su lujuria. Me alejé e intenté abofetearlo, pero él tomó mis manos y me sonrió. Su sonrisa era malvada y sus ojos oscuros. Pero me soltó y se alejó de mí.

—Nos vemos pronto, Sunshine... Cuídate... Recuérdame, Porshima.

Me lanzó besos al aire y salió de mi despacho.

¿Qué fue eso? Sr. Davis Grey, no eres bueno para mi vida. No me atreveré a acercarme a ti. ¡Mierda! ¿Cómo podré ignorarlo cuando es el mejor amigo y socio de negocios de mis jefes?

Fin del POV:

Gracias,

ShineeSunshine ❤️