Treinta y cuatro

Dean y yo entramos en mi dormitorio. Respiro lentamente mientras saco la caja de la prueba de embarazo de la bolsa de compras. Mis ojos encuentran a Dean. Él observa cada uno de mis movimientos con ansias. Trago saliva y abro la caja. ¿Qué pasa si estoy embarazada y no es de Dean? ¿Qué le digo? Tomo...