Capítulo 112 112

Por eso estaba tan seguro de sí mismo.

Jaime no dijo nada más.

Así que, cuando Lucían bajó las escaleras, no hubo sorpresa ni en el rostro de Gerardo ni en el de Jaime.

—Abuelo.

Lucían se plantó frente a Gerardo con una expresión serena, mostrándose respetuoso, como si nunca hubieran estado enfrenta...

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