Capítulo 64

Selene

Mientras limpio la mesa con un trapo húmedo y caliente, la voz de Makayla se cuela en mi cabeza a través de nuestro enlace mental. —Entonces, ¿cómo fue la conversación de anoche? —pregunta, aunque por el tono burlón de su voz, creo que ya lo sabe.

Mis mejillas arden más que un horno mientra...