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Jules fue el primero en salir del aturdimiento en el que estaba. Se dirigió hacia la mujer y la miró con furia.

—Lucy, creo que estás equivocada.

—Quizás deba decirlo de nuevo. Este es tu hijo, al que abandonaste hace años. Está aquí ahora. Puedes llevártelo. No lo quiero más.

Lucy empujó al pequ...