Molino de rumores

Dante

Unos días después de dejar a Eleni en el norte, me siento en la silla de plástico barata de la sala de visitas privadas de la correccional de Sing Sing y observo al guardia que está de pie en la esquina. No es nuestro tipo habitual, pero Hank prometió que este tipo sería igual de bueno.

—Soy...

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