17: Una cena de vampiros

Con todas las miradas girándose al unísono para mirar a Gabriel y a mí, vestida inapropiadamente, me quedo paralizada. Nunca me he sentido cómoda bajo la atención o los juicios de extraños, y mucho menos de varios... a la vez. Gabriel murmura algunas palabras sin sentido en mi oído que no logro escu...

Inicia sesión y continúa leyendo