BUSCANDO A CHARLOTTE

Federick

Mientras tanto, en occidente, me quedé de una sola pieza, acostumbrado a leer el periódico de la mañana. En la página principal, los anuncios de farándula me hicieron querer desfallecer; un gran letrero proclamaba el fin de mi existencia.

“El gran empresario Dorian Evans anuncia su compro...