Capítulo 85

—¡Emelia! ¡No te alejes demasiado! ¡Soy tu amo y puedo hacer lo que quiera contigo!— No es la primera vez que le oigo decir estas palabras. Para mí, estas palabras son hirientes. Solía irritarme al escucharlas, pero esta vez, al mirar su rostro, que está rojo oscuro de la ira, de repente entiendo qu...