Capítulo 12; Sinceridad.

Gianna tomó el artefacto y con una sonrisa marcó el número de su amiga, al tercer timbre ella respondió.

—¿Hola?

—Hola Melly, soy Gianna...

—¡Oh, Santo Dios!— la escuchó exclamar con voz ahogada. —¡ por todos los cielos, Gianna!, ¿Estás bien?, dime qué estás bien.

—Tranquila, tranquila Melly, es...