Capítulo 57

Me quedé boca abajo un rato mirando la caja de madera podrida, contemplando cómo el aparato que estaba ahí adentro me había cambiado tanto la vida, a mi y a todas las personas que me rodeaban era una maldición y me prometí que cuando todo terminara lo lanzaría a lo más profundo del mar para que nadi...

Inicia sesión y continúa leyendo