Inclinando la balanza

El murmullo en la caverna se hace más fuerte, obligando a un frustrado Ayris a golpear con la palma de la mano la mesa de madera frente a nosotros, astillándola con la fuerza.

—BASTA —su voz es lo suficientemente fuerte como para hacerse oír, pero permanece controlada. No dice nada más durante vari...

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