Capítulo 45 — De regreso a la rutina

La mañana en Los Ángeles amaneció bañada por una luz suave, filtrada por las cortinas blancas de la nueva casa que Donato les había regalado.

El aroma a café recién hecho y el murmullo de los bebés llenaban el ambiente con una paz cálida, casi doméstica.

En la sala, Margarita sostenía a una de l...

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