Capítulo 37 capitulo 37

—¿Ya han reparado tu casa al fin, hijo?

—Sí, mañana vuelvo. Pero puedo venir a recoger a Dana por las mañanas no tengo problema —ella lo ve de soslayo dedicándole una mirada de odio.

—Bueno Dana puede disponer de un coche de la casa.

—Si me parece bien que un coche la lleve, así no te molestas tanto...

Inicia sesión y continúa leyendo