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—¿A dónde vamos, Iván? —preguntó Jewel con una voz que reconocí como asustada. Suspiré.

—Te llevo a mi casa. Te vas a quedar allí mientras yo me encargo de algo —respondí a su pregunta y comencé a conducir. Era Lenin quien había llamado antes en el aula.

Le había pedido que me llamara si las cosas...

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