Traición

Amina

¡Ahí!

Ahí estaba de nuevo, el brillante pelaje oscuro que dejaba escapar jadeos fuertes mientras aparecía y desaparecía detrás de una fila de abetos. Se burlaba de mí con cada ida y venida, como si supiera que no podía seguirlo. Como si supiera que no podía moverme.

Estaba atrapada en m...