Capítulo 90

El estómago de Hayden rugía de hambre, pero con el brazo enyesado, ni siquiera podía usar su teléfono. Pasó todo el día sin comer.

Esa noche, la pareja se encontró abajo en su complejo de apartamentos.

—Cariño, ¿te apetece comida mexicana esta noche?

—¡Sí! —Alice asintió con entusiasmo.

Samuel d...

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