Capitulo 30

Sebastián se sentía angustiado, demasiado. No pensó jamás encontrar a Rayen en estas condiciones, siempre supo que la jovencita era inteligente, astuta, hábil, no era justo que todas sus capacidades se redujeran simplemente a ser la esposa "de." Lo peor de todo, Rayen era solo una niña, apenas había...

Inicia sesión y continúa leyendo