CAPÍTULO 105: LA LLAMADA QUE NO PERDONA

Killian

Ha pasado un día. Veinticuatro horas que no caben en ningún reloj. Corporación Cross arde en silencio: los números caen como fichas de dominó y el consejo me escribe correos con asuntos que no abro. La crisis de imagen, los patrocinadores congelando pagos, los accionistas preguntando por el ...

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