CAPÍTULO 145 - LA PROTECCIÓN DE LA LUNA

A pesar de la protesta de mi bestia interior, no había elección. Estábamos solos, y moriríamos allí si no usaba el poder que me quedaba, aunque estuviera prohibido, para liberarnos.

—Matémosla, eviten sus garras —ordenó Henry, el Alfa.

—¡Déjenmela a mí! —gritó Harry furioso. —Es lo que siempre qui...