Capítulo 39

ZANE

Después de comer en el comedor, estaba más que listo para tener a mi muñeca para mí solo.

No me molestaba socializar, pero prefería hacerlo con mi propia manada. El príncipe imbécil y yo nos llevábamos bien, para mi disgusto. Todavía no me gustaba el príncipe santurrón, pero él ponía a mi c...

Inicia sesión y continúa leyendo