Capítulo diecinueve

Ella se movía inquieta en la cama. Se giraba de izquierda a derecha, de derecha a izquierda y luego se quedaba mirando fijamente al techo.

Él la observó de reojo. Estaba tecleando rápidamente en el teclado.

—¿Qué te molesta? —dijo él, sin apartar la vista de la pantalla.

—¿C-...