20. Entre ellos dos.

No sé cómo llegamos a esto.

O quizás sí. Quizás siempre estuvo ahí, latente, como una tormenta esperando estallar.

La pelea quedó atrás. Las heridas sangrantes, los insultos, los celos… todo fue devorado por algo más fuerte. Algo animal. Incontrolable.

Ahora los tengo a los dos frente a mí.

John y D...

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