40. Me pregunto cómo terminé aquí.

El aire de la fiesta es espeso, cargado de perfume caro y promesas susurradas detrás de copas de champán. Estoy de pie en medio del salón, rodeada de luces doradas que hacen brillar los vestidos y las sonrisas falsas, y sin embargo sé que la verdadera tensión no está en los discursos ni en los brind...

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