Capítulo 37 Una verdad demasiado dolorosa y confusa

Fernando  volvió a estirarle la mano a Amelia para que ella se hiciera a su lado y hablara con él, la cercanía daría más confianza, pero ella estaba demasiado nerviosa para eso, en su lugar , comenzó a apretar sus dedos y a caminar por la habitación.

—Amelia ¿Qué es lo que pasa? Me estás ponien...