CAPÍTULO CUARENTA Y SEIS

ISABELLA

Por eso vino y puedo ver lo incómodo que está al ser confrontado con ese hecho.

—Está bien. Te preocupabas por mí.

No está bien. Mis sentimientos por este hombre son profundos y no van a desaparecer. Me duele que no haya venido porque me extrañaba, sino porque pensaba que estaba en peligro....

Inicia sesión y continúa leyendo