278- El vínculo de sangre

Mis párpados aletean y, muy lentamente, logro abrirlos. Se sienten pesados, y hasta el gesto más simple se convierte en un tormento doloroso. Con gran esfuerzo, consigo un pequeño resquicio de visión. El lugar es blanco y el absoluto silencio resalta el beep-beep-beep sobre mi cabeza. Una sombra pas...

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