Capítulo 117

—Señorita Jacqueline, buenos días —dijo una de ellas, adelantándose. Sostenía una bandeja cargada con todo tipo de platos de desayuno, elegidos y dispuestos de tal manera que resultaran apetitosos para Jacqueline.

—De verdad, debe recuperar sus fuerzas —dijo otra criada, con una voz suave como la s...