Capítulo 23: La posesión de la mafia

Jacqueline lo miró con furia y, si hubiera sido posible, lo habría hecho pedazos. Sus palabras demostraban claramente que él había sido quien le había cambiado la ropa y que incluso estaba dispuesto a hacerlo de nuevo.

—¿Cómo... cómo te atreves a cambiarme la ropa? —preguntó Jacqueline débilmente, ...