CAPÍTULO 28

McKenzie

Sabía que estaba enojado, no me lo mostraba, pero imaginé que el equipo de seguridad recibiría la peor parte. Cuando dijo que iba a correr, tuve una idea. Me quité la camiseta y agarré su mano llevándolo a la cama.

—Cariño, por favor, con lo que siento ahora mismo, tengo miedo de lastimar...