Capítulo 40

—Soy Sophie, la asistente del señor Hernández— respondí, intentando mantener un tono educado y profesional a pesar de su mirada escrutadora.

La mujer entrecerró los ojos mientras me miraba de nuevo con desdén. —Hmm, ¿y no puedes esperarle en la oficina?

Me removí incómoda bajo su mirada. —Solo sig...

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