Capítulo 30: Crisis de identidad

—Derek, tócame —susurro.

Él desliza la esponja hacia mis pechos y los rodea con ternura. La deja caer en el agua y usa ambas manos para acariciar mis pezones, girándolos entre sus dedos. Arqueo mi espalda y gimo, mi cuerpo suplicando por más. Se inclina y con una mano acerca mi rostro al suyo, besá...