Libro 3, parte 56

Estaba harto del silencio, harto de su ira, y harto de pensar que ella no me creía. No era un infiel y nunca lastimaría a mi familia de esa manera, especialmente a mi padre. La ira ardía profundamente dentro de mí al pensar que ellos podían creer eso de mí.

—Si todo esto fuera cierto, pregúntate un...

Inicia sesión y continúa leyendo